14 de marzo
Miércoles III de cuaresma
Dt 4, 1.5-9 ….tan cerca como lo está el Señor Dios nuestro de nosotros
Tener conciencia de que estás cerca de nosotros cuando te invocamos. Tú escuchas siempre porque mi ser, Señor, se hace palabra para ti, tantas veces silenciosa, tantas veces se llena de anhelos; mi palabra, mi ser, se hace deseo que te presenta, súplica con la que intercede, acción de gracias con la que te muestro mi corazón que, lleno de gozo, te reconozco cercano y presente, atento a mi vida, a la vida de nuestro mundo.
Siempre cercano, Señor, siempre con nosotros.