Seguirte

30 de septiembre
Miércoles XXVI

Lc 9, 57-62 Te seguiré a donde vayas

En el día de San Jerónimo, que amó tu Palabra, que fue nutrido pro ella, que la acogió en su seno y la hizo vida, verdad y belleza, quiero acoger el evangelio y rumiar esta afirmación, que una vez más pone en mi corazón el deseo de mi vida: “Te seguiré a donde vayas”. Y como se mi limitación, y mi pobre respuesta, te pido, Señor, tu misma gracia para seguirte. Escúchame y ten piedad.

09.30

Arcángeles

29 de septiembre
Santos Arcángeles
Jn 1, 47-51 Veréis a los ángeles de Dios

Mediadores y mensajeros tuyos, Señor, los arcángeles. Me quedo hoy con la figura de Gabriel, anunciando tu encarnación a María: Dios te salve, María, llena eres de gracia. Arcángel que anuncia la plenitud de tu bondad con el ser humano. Recibir tu gracia pues tú estás con nosotros y nos llamas y convocas a ser, también, mediadores y mensajeros tuyos, cauce de tu presencia en nuestro mundo, al igual que loas arcángeles, como María.

09.29

El más importante

28 de septiembre
Lunes XXVI
Lc 9, 46-50 Se pusieron a discutir quién era del más importante
Absurda y eterna preocupación del ser humano: ser importante, ser reconocido, tener preeminencia, ser tenido en cuenta, tener capacidad de influir, de….olvidando la importancia del servicio, de la sencillez, de la humildad, del desaparecer, del no figurar, de morir en la cruz. Dos estilos de vida: sabemos cuál es el tuyo. Y seguimos discutiendo quién es el más importante.

 09.28

Mandatos

27 de septiembre
Domingo XXVI
Salmo 18 Los mandatos del Señor alegran el corazón

Tus mandatos; Señor, fuente de vida y plenitud, alegran el corazón del hombre y de la mujer, pues le hacen latir desde la verdad de su ser, desde la profundidad abierta a ti, desde la verdad que tú nos ofreces para cimentar nuestra vida. Mandatos que hoy aparecen en el evangelio…si tu mano te hace caer, córtatela….y que nos hablan de la radicalidad que, como opción fundamental por ti, alegra el corazón, llena de vida.

 09.27

Alégrate y goza

26 de septiembre
Sábado XXV

Za 2, 5-9.14-15 Alégrate y goza, que vengo a habitar en medio de ti

La primera  que desbordó de alegría y gozo por tu venida en medio de nosotros fue maría, que se hizo seno tuyo, que te dejó crecer en su interior. Cada uno de nosotros podemos alegrarnos y gozar cuando nos damos cuenta que estás en nosotros.

“sabemos bien que el Verbo eterno reside en el fondo de nuestro ser tan inefablemente cerca de nosotros y en nosotros, tan íntimamente presente…” (Taulero)

09.26

Interrogante

25 de septiembre
Viernes XXV
Lc 9, 18-22 ¿Quién dice la gente que soy yo?
La pregunta sigue resonando hoy, en medio de nuestro mundo. Muchos afirman que eres un gran hombre, un gurú, un revolucionario, un contracultural, un ser excepcional, que pasó haciendo el bien, curando a los enfermos y liberando a los oprimidos. Es verdad. Pero solo puede abrirse al misterio de tu persona quien pide la gracia de poder decir: Tú eres el mesías, el Salvador,  el Hijo de Dios vivo.

09.25

Festejar la gloria

24 de septiembre
Jueves XXV

Salmo 149 Que los fieles festejen su gloria

El salmo nos invita a festejar tu gloria, Señor, a canta para ti, a alabar tu nombre con nuestro cuerpo, bailando danzas, tocando tambores y cítaras…todo ello nos puede sonar un poco raro….pero no debemos dejar de interrogarnos sobre cómo festejar y manifestar que tu eres Dios, que tu nos amas. Recuperar la dimensión de la fiesta en honor de tu nombre…podríamos empezar a hacerlo cada domingo.

09.24

Proclamar el Reino

23 de septiembre
Miércoles XXV

Lc 9, 1-6 Los envió a proclamar el reino de Dios

Enviados por ti, Señor, para anunciar en nuestra sociedad, en medio de nuestro mundo, que tu reino está presente en medio de nosotros, en cada uno de nosotros, que basta abrir los ojos y el corazón para comprender el don inaudito que nos haces al plantar tu tienda entre nosotros y ofrecernos la plenitud en nuestra vida. Enviados por ti a esta hermosa y difícil misión.

09.23

Mi familia

22 de septiembre
Martes XXV
Lc 8, 19-21 Mi madre y mis hermanos son éstos

La familiaridad contigo se adquiere, Señor, no por lazos de sangre, que indudablemente unen, sino por la unión que es fruto del escuchar tu palabra y ponerla por obra. Comunión en ti y en tu persona lo que nos hace hermanos. Bajo el manto acogedor de María, Madre de la Iglesia, que fue la primera en encarnar tu palabra y hacerla vida.

09.22

San Mateo

21 de septiembre
San Mateo

Mt 9, 9-13 Sígueme

Apenas una palabra y se estás manifestando, Señor, todo el amor de elección que me regalas, la fuente inagotable que me ofreces, el camino por el que quieres que vaya, que no es otro que tú mismo. Sígueme. Cada día, en cada instante, en cada latir de mi corazón me estás llamando, para que mi vida sea una respuesta inmediata, como la de Mateo, a la llamada de tu amor.
 

09.21