10 de octubre
Domingo XXVIII
2 Tm 2, 8-13 Es doctrina segura: si morimos con él, viviremos con él
Es la verdad. En la medida que participo de tu muerte participo de tu vida. Cada vez que en lo pequeño y cotidiano muero a mí mismo, a mis apetencias, a mi afirmaciones, a mi ser más yo, recibo la vida que tu me das, tan abundante. Lo aparentemente contradictorio es una realidad vital. Ahí está tú, Señor, uniéndonos a tu misterio Pascual.
¡¡Es doctrina segura!!
Creo que los que nos hemos impregnado de Él lo sabemos. Por lo menos así lo siento yo. Debo de morir a mi yo, a mis egoísmos, a mis faltas de caridad. Para que en mi vida lo vean a él, ya sé que no siempre lo consigo,pero sigo unida a él, pese a mis faltas y pecados.¡¡Ayúdame Señor a pulir mi corazón!!