Presentación

2 de febrero
Presentación de Jesús en el Templo

Lc 2, 22-40 Porque mis ojos han visto a tu Salvador

Mis ojos han visto, y ven tu luz. Mis ojos reciben la claridad de tu salvación En mis manos pones tu cuerpo, pequeño, presentado, que es tu gloria hecha carne. Ahí te recibo, y me consagro a ti. En tus manos estoy, Señor, lo se y te lo digo en esta jornada mundial de la vida religiosa. Gracias por llamarme, gracia por sostenerme, gracias por tu fidelidad.