22 de mayo
VI domingo de pascua
Jn 14, 23-29 Mi paz os dejo mi paz os doy
Tu paz, el don tan deseado por cada uno de nosotros, por la humanidad, siempre tan bélica. La paz es un don que precede de ti, el don de sabernos en tus manos, amados, confiados, enraizados en la naturaleza misma de su ser amor. Tu paz, Señor, tan necesaria en tantas regiones de nuestro mundo que viven en plena guerra. Que tu paz pacifique nuestros corazones.
Tu puro don. En María.