Derroche

15 de septiembre
XXIV domingo

Tim 1,12-17 El Señor derrochó su gracia en mí

Es verdad. El tesoro de tu gracia ha sido un derroche en mi vida, lo sigue siendo. Me has dado la fe en Ti, tu amor misericordioso. Te has compadecido de mi pequeñez, del pecado que roe mis entrañas. Te has hecho reconciliación y salvación. Me has envuelto en tu abrazo, tan cálido y tan paternal que aún conmueve mis entrañas. Toda compasión, toda bondad, toda ternura. Hazme transmisor de tu gracia, testigo de tu amor en el mundo.

09.15