25 de septiembre
Miércoles XXV
Lc 9, 1-6 No llevéis nada para el camino
He venido desnudo al mundo, volveré desnudo a la tierra, de la nada vengo, a la nada voy, ¿qué riqueza soy? Despréndeme de todo para el camino, ni miraré las flores, ni temeré las fieras, y pasaré los montes y fronteras proclamando que solo eres tú principio y fin de la existencia, que en ti está la fuente viva, que tu luz nos hace ver la luz.