Conversión

20 de febrero
Miércoles I de cuaresma

Jonás 3, 1-10 Y vio Dios sus obras, y su conversión de la mala vida

Con toda seguridad, Señor, mis obras no acompañan a mis deseos de conversión. Por lo tanto no mires mis obas sino mis deseos, esos mismos deseos que tú pones en mi corazón, y con tu gracia vete conduciéndome hacia la conversión verdadera. Que acepte mi ser pecador, que me abra a la gran dicha de tu misericordia, por tu bondad, por tu lealtad, lava del todo mi delito. Del todo, sin reservas, sin fisuras, sin dejarme nada para mí. Que así sea.

eva-by-irina-ionesco