29 de julio
Viernes XVII
Lev 23, 1. 4-11. 15-16. 27. 34b-37 Al séptimo día no haréis trabajo alguno
Descansar para honrarte, para reconocer que tú eres el creador, que no hay otro díos fuera de ti, que tampoco soy yo Dios, que mi esfuerzo y mi obrar no lo obtienen todo, pues ¿de dónde viene todo el bien que recibo si no es de ti? Descansar, Señor, un día a la semana, descansar de mis afanes, para ofrecerte mi ser en el descanso, para recordar que soy tuyo y que mi ser procede de ti.
¡¡Gracias Nano, por tu meditación sobre el descanso!! No tengo palabras para añadir.
Un saludo Josefa