30 de enero
Jueves III
Hb 10, 19-25 Mantengámonos firmes en la esperanza que profesamos
En este año jubilar, peregrinos de la esperanza, es bueno recordar que tú eres nuestra esperanza, que tú nos llamas a vivir unidos a ti, fijos los ojos en ti, para alimentar esta esperanza que siempre es don tuyo. Aumenta nuestra fe, nuestra esperanza y nuestra caridad.
