Renacerás

21 de marzo
Lunes III cuaresma

II Re 5, 1-15 Tu carne renacerá y quedarás limpio

Eso me dices. A Naamán, el sirio, le toca en su ego el mandato que el profeta le da para quedar limpio. Mi ego también reclama muchas veces, y ofusca, la comprensión de tu mensaje. Pero como quiero que mi carne renazca, y quiero quedar limpio, dime, Señor, qué es lo que tengo que hacer para que suceda según tu voluntad.

20 de marzo
III domingo de cuaresma

I C 10, 1-6-10-12 Y la roca era Cristo

Hoy, domingo de cuaresma, de todas las lecturas me quedo con esta frase. Y re pido, Señor, que realmente sigas siguiendo la roca de mi vida, la zarza ardiente, el manantial que sacia mi sed. Me descalzo y me adentro en tu ser sagrado, que me sostienes, pues in ti no puedo ni tan siquiera existir. Aunque lo intente.

el justo

19 de marzo
San José

Mt 1,16.18-21.24ª José, como era justo

El justo José. Contigo y con María. Desde el inicio. Desafiando las apariencias, lo inexplicable, el qué dirán…abrazando tu misterio de amor, tu camino de salvación. Como él, Señor, nosotros en tu Iglesia. Haznos fecundos en el amor.

Tu hermano

18 de marzo
Viernes II de cuaresma

Gn 37, 3-4.12-13.17-28 Vamos a matarlo

Aún hoy. Y la sangre de nuestros hermanos clama al cielo. Perdónanos, Señor.

Lázaro

17 de marzo
Jueves II de cuaresma

Lc 16, 19-31 Y un mendigo llamado Lázaro…con ganas de saciarse de lo que caís de la mesa de rico

Aún hoy. Nuestras migajas. A las que tantos pobres aspiran. Conviértenos y haznos creer en tu evangelio.

A servir

16 de marzo
Miércoles II de cuaresma

Mt 20, 17-28 Igual que el hijo del hombre no ha venido a ser servido sino a servir

Y sigues mostrándonos el camino que hemos de seguir: el servicio. Como pobrecitos esclavitos indignos. Los últimos. Contigo.

Humildad

15 de marzo
Martes II de cuaresma

Mt 21, 1-12 El que se enaltece será humillado, el que se humilla será enaltecido

La humildad, el camino que nos muestras. Ecce homo. No hay otro: ni padres, ni maestros, ni excelencias reverendísimas, ni canónigos, ni sochantres, ni yo me creo que soy más que tú porque….cuánto nos cuesta, Señor, vivir sencillos y humildes, descansando nuestros afanes en ti.

Misericordioso

14 de marzo
Lunes II de cuaresma

Lc 6, 36-38 Sed misericordiosos como vuestro padre es misericordioso

A ello nos llamas, Señor, tú, el rico en misericordia. Ayúdanos con la fuerza de tu gracia en nuestra debilidad inmisericorde. Danos el gesto y la palabra oportuna frente a quien se siente solo y desamparado. Ayúdanos a mostrarnos disponibles frente a quien se siente explotado y deprimido. Que en tu Iglesia, Señor, cada uno de nosotros seamos lugar de encuentro, de cuidado, de acogida, de misericordia, de paz.

Oscuridad

13 de marzo
II domingo de cuaresma

Gn 15, 5-12 Un terror intenso y oscuro cayó sobre él

Abrán en el abismo de la propia oscuridad. Como tantos hombres y mujeres de nuestro mundo, enfrentados a los cuatro jinetes del apocalipsis: la muerte que viene con la pandemia, a la guerra, al hambre. Y tú en el caballo blanco, transfigurado, mi luz y mi salvación, la defensa de mi vida. Tu rostro buscaré, señor, no me escondas tu rostro.

Mis enemigos

12 de marzo
Sábado I de cuaresma

Mt 5, 43-48 Amad a vuestros enemigos

Amad a vuestros enemigos y rezad por los que os persiguen, para seáis hijos de vuestro Padre celestial. Tu Palabra, en el sermón de la montaña, cobra cada vez que la escucho su real actualidad. Así nos pides que vivamos, así que nos relacionemos, así que seamos discípulos tuyos. Siguiendo tus huellas. “Padre, perdónales porque no saben lo que hacen”