3 de febrero
Jueves IV
Mc 6, 7-13 Les encargó que llevaran para el camino un bastón y nada más
Así caminan tantos religiosos y religiosas por los caminos de nuestro mundo, enviados por ti, anunciando la Buena Noticia de tu reino, predicando la conversión, echando muchos demonios, ungiendo a los enfermos, curando, enseñando, tanto testimonio sin alharacas, sufriendo la incomprensión que viene, a veces, algunos miembros de la Iglesia. Despojados, pobres, crucificados contigo, por ti y en ti, transmisores de tu salvación.
Toda mi vida agradeceré a las personas de Vida Consagrada, mi educación tanto humana como cristiana, ya que con Ellas me crié, me dieron todo su amor, sé que fui una privilegiada, no todos hablan igual,pero también sé que como persona respondí, con entrega y amor al que me daban.
Que sepamos ver el lado bueno y generoso de los que con valentía te dicen ¡¡Aquí estoy Señor, has de mi lo que quieras! Yo también te lo digo Señor