27 de mayo
Jesucristo Sumo y Eterno sacerdote
Lc 22, 14-20 Esto es mi cuerpo, que se entrega por vosotros
Ponerme ante ti, Señor, contemplar tu entrega, tu ser sacerdotal, tu dar la vida para que la tengamos abundante, tu servicio sencillo y humilde, tu unión intima con el Padre, tu cuerpo entregado, tu sangre vertida, fuente de vida purificada, tu palabra que conforta, recrea y enamora…ponerme ante ti, señor, en esta fiesta tuya, contemplar y aprender en silencio.
Jesús, Somo y Eterno Sacerdote. Que quisiste que tus hijos te representaran en la tierra, que fuésemos otro Cristo bajo la acción del Espíritu santo.
Ilumina a tus ministros consagrados por el orden, a todos los bautizados que hemos sido incorporados a tu sacerdocio.
Qué muestras vidas sea un fiel reflejo de lo que hemos recibido y de lo que tenemos que manifestar al mundo.
¡¡Refuerza el número de las personas que se consagran a Ti, que te sean fieles y transparente!!
Yo, hoy te pido por Ellos, dales luz y fuerzas en las luchas de la vida.