15 de julio
Viernes XV
Is 38,1-6.21-22.7-8 He escuchado tu plegaria y he visto tus lágrimas
Es una certeza. El Señor siempre escucha lo que le decimos, El siempre está viendo lo profundo de nuestro corazón, conoce nuestras acciones, nada nuestro le es ajeno. Y nuestra vida, delante de él, recibe el don de su mirada que es pura misericordia