11 de marzo
Jueves III cuaresma
Salmo 94 entremos en su presencia dándole gracias
Así es. Cada día. El deseo, al menos, de entrar en tu presencia dándote gracias. Con un corazón agradecido. Un estilo de vida. Reconociendo que todo procede de ti. Y que por todo quiero darte las gracias. O al menos unirme, cada día, a la acción de gracias que elevas al Padre en la eucaristía.