14 de marzo
IV domingo de cuaresma
Ef 5, 8-14 Vivid como hijos de la luz
Soy hijo de tu luz. Tú me has dado la luz, tu luz, iluminas mis oscuridades. Cristo Jesús, ¡oh fuego que abrasas!, que las tinieblas en mi no tengan voz. Cristo Jesús, disipa mis sombras y que en mi solo hable tu amor. Que así sea.