11 de septiembre
Jueves XXIII
Lc 6, 27-38 Amad a vuestros enemigos
¿Imposible? Eso me pregunto escuchando tu palabra hoy, pensando no tanto en mis enemigos, sino en las personas con las que me cuesta relacionarme. Si tuviera un enemigo, alguien que hiciera peligrar mi vida, mi hacienda, mi honor, mi imagen, ¿le amaría? Si estuviese luchando en un bando, una guerra sin cuartel, como tantas que hay hoy en nuestro mundo, ¿amaría a mi enemigo? Sólo tú, y tu Palabra, tiene capacidad para mostrar lo más real que anida en nuestro corazón.