Terreno sagrado

3 de marzo
III domingo de cuaresma

Ex 3, 1-8.13-15 Quítate las sandalias porque el sitio que pisas es terreno sagrado

El terreno que piso eres tú, Señor, porque te manifiestas en la tierra, en la soledad y el silencio del desierto, en la realidad que me circunda, en la zarza que arde sin consumirse, en la opresión que sufre el pueblo y que llega hasta tus oídos como un clamor inaudito que suscita la indignación. Tú eres, Señor, el Dios del cielo y tierra, el Dios libertador, el Dios sale e mi encuentro, el Dios que me envía, el Dios que me libera, el Dios de la vida, el más puro don. Descálzame para postrarme ante ti, Señor y Redentor.

03.03