28 de diciembre
Santos Inocentes
Mt 2, 13-18 Un grito se oye en Ramá, llanto y lamentos grandes
La madre llora a su hijo, a sus hijos, junto a la cruz del mundo. Inocentes que mueren de hambre, que son desplazados, que sufren la falta de higiene, de salud, de medios culturales. Hijos e hijas de nuestro mundo maltratados, prostituídos en la degradante esclavitud sexual infantil, padeciendo los horrores de la guerra, presos de nuestra sociedad de consumo, del placer, de la abundancia que esclaviza, que margina…carentes de afectos, llenos de todo y de nada….santos inocentes de nuestra sociedad, de nuestro mundo…Su madre rehúsa el consuelo, porque ya no viven.
Los niños inocentes de ayer y de hoy
Siguen estorbando, en su tiempo, y ahora ya antes de nacer.
Son, incontables, los niños que no abren los ojos a la vida.
Esto es tremendo, pone el corazón dolorido, de tanta criatura desvalida, marginada, explotada, y con abusos de toda índole.
Señor te pido por la intercesión de los niños inocentes para poder apaliar esta tremenda injusticia, que nos atañe a todos.