Alzad la cabeza

28 de noviembre
Jueves XXXIV

Lc 21, 20-28 Levantaos, alzad la cabeza, se acerca vuestra liberación

Tú eres mi liberación, Señor. Cuando estoy postrado, me levantas. Cuando tengo la abeza gacha, me alzas la mirada para que vea cómo me miras, cómo me conduces a la paz. Gracias. Por el don de tu misericorida.

Tus obras

27 de noviembre
Miércoles XXXIV

Ap 15, 1-4 Grandes y maravillosas son tus obras

Solo quiero reconocerlo, Señor, y por eso te lo digo: grandes y maravillosas son tus obras, Señor, justos y verdaderos tus caminos, rey de los siglos. Porque tú solo eres santo. Y mientras escribo esta oración mi boca la pronuncia, y mi corazón proclama tu infinita gloria.

Pánico

26 de noviembre
Martes XXXIV

Lc 21, 5-11 Cuando oigáis noticias de guerras y revoluciones, no tengáis pánico

El pan nuestro de cada día hoy, en nuestro mundo. Guerras y revoluciones, descomposición del estado democrático, fanatismos, corrupciones, desgajamientos de lo establecido…y tu consejo, no tengáis miedo, porque es necesario que esto ocurra primero. Pongo mi confianza en ti y en tu palabra, Señor.

Viuda

25 de noviembre
Lunes XXXIV

Lc 21, 1-4 Ella, que pasa necesidad, ha echado todo lo que tenía para vivir

Dar hasta despojarse. Dar y desprenderse. Dar hasta que duela. Dar hasta morir por amor. Como tú hiciste con nosotros, Señor. Tomad, Señor, y recibid todo mi ser, todo mi entendimiento, toda mi voluntad. Vos me lo distéis, a vos lo torno. Dade vuestro amor y gracia, que ellas me bastan.

Rey

24 de noviembre
Cristo Rey

Jn 18,33b-37 Tú lo dices, yo soy rey

Tú eres rey, mi rey, nuestro rey. Te adoro, Señor, en este domingo en el que celebramos que viene a nosotros tu reino.

Dios de vivos

23 de noviembre
Sábado XXXIII

Lc 20, 27-40 No es Dios de muertos, sino de vivos. Porque para él todos están vivos

Es así. La vida la recibimos de ti, y tú nos mantienes en vida, y nos vivificas. Gracias, Señor, por la hermosura de tu don.

En tu boca

22 de noviembre
Viernes XXXIII

Ap 10, 8-11 A tu boca será dulce como la miel

Así tú Palabra, que sale de tu boca, y fecunda mi tierra. Tu Palabra, que pronuncias sobre mi, que me da el aliento, que me hace ser, es la alegría de mi corazón. Que no vuelva vacía a tu presencia, sino llena de frutos evangélicos, fecunda de tu salvación.

Presentación de María

21 de noviembre
La presentación de María

Zc 2, 14-17 Alégrate y goza, Sión, pues voy a habitar en medio de ti

Alegría y gozo, porque eres un Dios que estás con nosotros, en medio del camino de la vida, y nos congregas para el banquete pascual de tu amor. Como hiciste en otro tiempo, con los discípulos de Emaús, tú nos explicas las escrituras y partes para nosotros el pan. Dios encarnado, Dios cercano, Dios humano. Humanízanos.

Alabad

20 de noviembre
Miércoles XXXIII

Salmo 150 Alabad

Termina el salterio con esta invitación a tu alabanza. Porque tú eres Dios y soberano de todo yo te alabo, Señor; por las maravillas de tu amor con nosotros te alabo, Señor; porque sigues escribiendo historia de salvación en nuestra vida, yo te alabo, Señor.

en tu casa

19 de noviembre
Martes XXXIII

Lc 19, 1-10 Hoy ha llegado la salvación a esta casa

Cada día, Señor, entras en nuestra casa, la habitas, y nos llamas, con amor, a la conversión, a dar la mitad de mis bienes a los pobres, a acogerte, a escucharte, a centrar mi vida en ti….me habitas, y por ello te doy las gracias.