6 de septiembre
Miércoles XXII
Col 1, 1-8 Damos gracias a Dios orando siempre por vosotros
Sea así. Una cadena de agradecimiento y oración, los unos por los otros, delante de Dios, fuente de toda bondad, de toda paz, de todo amor. Una oración incesante, que brota del corazón y hace que surja la vida verdadera, delante de Dios.
Autor: Nano SM
Religioso Marianista, sacerdote. Actualmente trabajo en la pastoral de un colegio en Madrid, precisamente donde estudié y sentí la llamada a la vocación religiosa.
Desde hace tres años escribo cada día un comentario a la Palabra de Dios, que me ayuda a encarnarla y a darla a los demás. De alguna manera participo en la misión de María, dando a Jesús, dando su Palabra.
Lee todas las entradas de Nano SM