30 de abril
Viernes V de Pascua
Jn 14, 1-6 Yo soy el camino, la verdad y la vida
Pararme. Hacer silencio. Repetir: tú eres el camino, la verdad, la vida. Camino, verdad, vida. Tú mi camino, mi verdad, mi vida. Dejar que las palabras de esta realidad penetren en mi corazón y ahora se hagan verdad en mí. Por el don de la fe.
Hoy Señor me das paz,¡¡No se turbe vuestro corazón!!
No quieres que mi corazón viva turbado, por lo más mínimo pierda la paz.
Me indicas el Camino, ayudame a no perderme en éste mundo tan agitado.
Señor te amo, sé que Tú eres ese Camino, ya no puedo decir que no lo conozco, lo has dejado muy claro y nos guías hacia él.
Un saludo .Josefa
Sí, Señor, pararme, hacer silencio para poder oír tus palabras, para poder oír que Tú eres el camino, la verdad y la vida. Y en ese silencio y en esass palabras, solo descansar y decidir seguirte.
Hoy tus palabras suenan a caricia y me invitan a la vida.