2 de noviembre
Fieles difuntos
Rm 6, 3-9 Si hemos muerto con Cristo creemos que también viviremos con él.
Vivir y morir contigo, Señor, que eres el camino, la verdad, la vida. Participar de tu misterio pascual, al que fuimos incorporados por el bautismo. Abrirnos al don de la fe, que nos permite creer que los difuntos están llamados a vivir en la hermosura de tu amor y tu misericordia, contemplando tu rostro. A ellos les recordamos hoy. Su muerte nos recuerda que también nosotros moriremos.
Señor, vivo consciente que Tú has resucitado, que nos estas esperando para gozar de la vida Eterna.
Sé que nuestra vida tendrá pleno sentido en el día del encuentro Contigo.
¡¡Qué mi paso por esta vida sea hacer tu voluntad!! Y me uno a la plegaría de buen ladrón; Acuérdate de mi cuando me llames.
Unidos en la oración por nuestros hermanos difuntos. Josefa