3 de noviembre
Miércoles XXXI
Flp 2, 12-18 Mostrando una razón para vivir
En medio de nuestra sociedad secularizada, Señor, nos llamas a brillar como lumbreras, mostrando una razón para vivir. Por ti, para ti, vivimos, nos movemos, existimos. ¿Cómo traduzco esta realidad en mi vida diaria? ¿Qué significa? ¿Cómo doy testimonio de ti, mi razón para vivir?
Aunque esta sociedad tienda a ignorarte Señor, no les vale de nada, Tú siempre te manifiestas: en la vida ,la naturaleza, el amor, la misericordia. Yo sí te siento junto a mi.»¿Cómo traduzco esta realidad en mi vida diaria?»Comenzando mi jornada en tú presencia, pidiéndote la gracia de no separarme de Ti. Creo que mis acciones ,van siempre encaminadas a ser portadora de tu Palabra, por lo menos así lo deseo.
¡¡Muy buen examen Luis!!