16 de octubre de 2011
Domingo XXIX
Tes 1, 1-5b Recordamos…
Si Pablo tuviera que recordar la actividad de mi fe, el esfuerzo de mi amor y el aguante de mi esperanza, ¿podría recordar algo? Sin duda la fe me pone ante ti, el amor lo recibo de ti, la esperanza me abre a tu salvación permanente. Fe, amor y esperanza por puro don tuyo. Pongo ante ti, Señor, las tres. Auméntalas en mi vida, para tu gloria. Es la oración que hago al inicio de esta semana, en la que quiero vivir más conscientemente las tres.