6 de diciembre
Martes II de adviento
Is 40, 1-11 Consolad, consolad a mi pueblo
La humanidad necesitada de consolación. Dame el don de consolar con el consuelo con el que tú me consuelas. Consuelo desde las entrañas de tu misericordia. Porque la humanidad clama desde su pobreza, su dolor, su frustración, su explotación..tu consuelo, Señor