Santos Inocentes

28 de diciembre
Santo Inocentes

I Jn 1, 5-2,2 Dios es luz y en él no hay tiniebla alguna

Y sin embargo tantas veces, como cuando somos indiferentes ante el sufrimiento de los niños ultrajados, cuando tiramos balones fuera como Iglesia ante los abusos sexuales a menores, cuando endurecemos nuestro corazón estéril y no hacemos por paliar tanto dolor y tanto sufrimiento, entonces estamos prefiriendo las tinieblas a tu luz. Cual Herodes. No hay otra actitud posible sino estar siempre junto a la víctima. Sin vericuetos de sacristía. Ni otra palabra que la petición de perdón. Perdónanos tú, Señor.