19 de diciembre
Feria de adviento
Sal 70 Que mi boca esté llena de tu alabanza y cante tu gloria
Porque tú, Dios mío, eres mi esperanza y mi confianza desde mi juventud, porque me escogiste desde el vientre materno y desde el seno tú me sostenías, porque me instruiste sin que me diera cuenta y has sido la roca de mi refugio, el alcázar donde me salvo, mi peña, porque me das alas de águila para ir por todo el mundo proclamando tu alabanza y cantando tu gloria, que ya llega, ya está cerca, ya viene nuestra salvación.
Porque mi peña y mi alcázar eres tú. Porque no te quedas a distancia, sino que estás cerca, muy cerca. Tú me salvas y me socorres cada día, me haces levadura en tus manos y en mi pequeñez imprimes el deseo de hacer fermentar la masa, de proclamar tu salvación. Porque Tú Señor, estás cerca.