Profeta de fuego

15 de diciembre
II sábado de adviento

Eclesiástico 48,1-4.9-11 Un profeta como un fuego

Cuyas palabras eran como un horno encendido, una llama de amor vivo consumiendo el centro del ser en arrebatos de amor, en arreboles de luz eterna. Un ser desgarrado cuyas brasas son rescoldo de vida y abundancia. Ser como el fuego de Elías, Señor, vivos y consumidos en ti, en la fuerza de tu Palabra, esperando tu venida.

3 opiniones en “Profeta de fuego”

  1. ¡¡Ven Señor a salvarnos!! Con el fuego de tu Amor.
    Con la gracia de su salvación.
    Ayúdanos a estar preparados.

  2. Si será difícil que Dios tuvo que enviar un profeta «para que los padres se reconcilien con los hijos“ y así vivan todos felices y libres

Comentarios cerrados.