Mi espina

8 de julio
XIV domingo

II Cor 12, 7-10 Una espina en la carne

La hora de la liberación pertenece a la soberanía de la gracia. Me haces llegar esta frase, Señor de la gracia, de mi liberación, cuando más clavada tengo la espina en la carne, y es espina de fuego, que me consume en mí mismo. En mi debilidad se realiza tu gracia, que me libera. No me dejes, tu gracia vale más que la vida, te alabarán mis labios.

Autor: Nano SM

Religioso Marianista, sacerdote. Actualmente trabajo en la pastoral de un colegio en Madrid, precisamente donde estudié y sentí la llamada a la vocación religiosa. Desde hace tres años escribo cada día un comentario a la Palabra de Dios, que me ayuda a encarnarla y a darla a los demás. De alguna manera participo en la misión de María, dando a Jesús, dando su Palabra.