14 de junio
Sábado X
Sal 15 Tú, Señor, eres el lote de mi heredad
Palabras del salmo que quiero recitar en las entrañas de María, que se hizo don para ti y nos dio tu don: Tú Señor, eres el lote de mi heredad, tú eres mi bien, mi suerte esté en tu mano. Tengo siempre presente al Señor, con él a mi derecha no vacilaré. Diciendo estas palabras ¿qué he de temer? Se llena de alegría mi corazón, se gozan mis entrañas, porque no me entregas a las muchas muertes que rondan mi vida, ni me dejarás conocer la corrupción sin ti. Por eso, Señor, te bendigo con tus palabras.