3 de octubre
XXVII domingo
Gn 2, 18-24 No es bueno que el hombre esté solo
Nos has creado, Señor, para el encuentro, la comunicación, el diálogo franco y transparente, el hacernos don para los demás. No es bueno que esté solo, que me encierre en mi mundo, que me desentienda de la realidad, de mis hermanos. Cuando soy en relación, soy fecundo. Siempre en ti.
Autor: Nano SM
Religioso Marianista, sacerdote. Actualmente trabajo en la pastoral de un colegio en Madrid, precisamente donde estudié y sentí la llamada a la vocación religiosa.
Desde hace tres años escribo cada día un comentario a la Palabra de Dios, que me ayuda a encarnarla y a darla a los demás. De alguna manera participo en la misión de María, dando a Jesús, dando su Palabra.
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