1 de septiembre de 2007
Sábado XXI
1 Ts 4, 9-11 Ocupaos de vuestros propios asuntos, trabajando con vuestras propias manos
Parece, Señor, que estabas aguardando la vuelta al trabajo, en este principio de curso, para regalarme esta palabra que invita, iluminada por el evangelio de hoy, a comenzar la actividad laboral sabiendo que los talentos que tú me has dado los tengo que poner a producir en tu nombre. En todo, Señor, serte fiel: en lo poco de cada día, en lo sencillo del trabajo, en lo que pasa desapercibido y en lo importante. Que mi trabajo brote de ti como su fuente y tienda a ti, como a su fin.
Es usted bienvenido! Que grato volver a tener su pagina nuevamenten en mi correo.
Quiera Dios derramar en usted su sabiduría, esa que tan generosamente comparte con nosotros,y a la vez lo llene de alegria en su ministerio. Es mi oración
Gloria al Padre al Hijo y al Espíritu Santo…
Como era en un principio ahora y siemre por los siglos de los siglos AMÉN
Un nuevo período comienza, un nuevo tiempo para trabajar, para ejecutar aquello sobre lo que hemos reflexionado largamente en las vacaciones…Señor, gracias por esta nueva oportunidad …gracias por la invitación siempre abierta de caminar a tu lado…Bendito y Alabado seas por siempre Señor, Tú que en tu inmenso Amor me has bendecido con mi familia, mis hijos, esposo, amigos, trabajo y este país tan hermoso, para el cual pido tu bendición especial en estos tiempos difíciles…Amén, así sea.