3 de marzo
III domingo de cuaresma
I Cor 1, 22-25 Predicamos a Cristo crucificado
Y delante de tu cruz, Señor, donde tú estás clavado, me pregunto cada mañana qué he hecho por ti, que hago por ti, qué voy a hacer por ti. Y te respondo en silencio y adoración. Y me digo que lo débil de Dios es más fuerte que las personas. Quedo contigo, Señor.
Autor: Nano SM
Religioso Marianista, sacerdote. Actualmente trabajo en la pastoral de un colegio en Madrid, precisamente donde estudié y sentí la llamada a la vocación religiosa.
Desde hace tres años escribo cada día un comentario a la Palabra de Dios, que me ayuda a encarnarla y a darla a los demás. De alguna manera participo en la misión de María, dando a Jesús, dando su Palabra.
Lee todas las entradas de Nano SM