12 de junio
Miércoles X
II Corintios 3, 4-11 El Espíritu da la vida
Pues a eso estamos llamados, a vivir según tu Espíritu, a entrar mansamente en tu resplandor, que no es caduco, sino más estable que el cielo. Participar de tu vida, vivir en Ti, olvidando lo efímero, anclados en lo permanente. Para entrar en la plenitud que nos ofreces, entre los pucheros de cada día. Gracias.
De ti recibo
la vida verdadera
que ya deshace
la muerte duradera
de vivir sin ti.
Es tan maravilloso bucear en ti que el tiempo se hace espuma en tus manos