16 de mayo
Lunes IV de pascua
Jn 10, 11-18 El buen pastor da la vida por sus ovejas.
Como tú, Señor. Das la vida para que vivamos cada día; me das la vida conociéndome, pronunciando mi nombre, entregando la tuya en mi cuidado. Tú, Señor, abundante, generoso, desbordas mis propias previsiones, me colmas de ternura, me pones en tus hombros, me llevas por tus caminos de vida con una ternura infinita, con una misericordia inabarcable. Gracias, Buen Pastor.
Como anhela la cierva la corriente de agua así te espero yo, sedienta y confiada en que saldrás en mi busca cuando me pierda en el abismo de la noche.
Buen Pastor, no tengo palabras para darte las gracias por guiar mi vida, por enseñarme el camino, cuando me desvío me reconduces con Amor. Te siento presente dentro de mi corazón, lo que más te pido es que no salgas de él, y me quede a la deriva.¡¡Gracias Señor por guiarme!!
Señor…..
Se que ayudas con cariño y dulzura a las personas que mas necesitadas estan, ojala pueda empaparme de tu bondad y saber llevar el ejemplo a las personas que puedan necesitarme, pero primero debo quererme yo para poder ayudar a los demas