1 de enero
Santa María, madre de Dios
Nn 6, 22-27 Ésta es la fórmula con que bendeciréis:
El Señor te bendiga y te proteja,
ilumine su rostro sobre ti y
te conceda su favor.
El Señor se fije en ti y te conceda la paz.
Autor: Nano SM
Religioso Marianista, sacerdote. Actualmente trabajo en la pastoral de un colegio en Madrid, precisamente donde estudié y sentí la llamada a la vocación religiosa.
Desde hace tres años escribo cada día un comentario a la Palabra de Dios, que me ayuda a encarnarla y a darla a los demás. De alguna manera participo en la misión de María, dando a Jesús, dando su Palabra.
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¡¡Gracias Señor, nunca dejas de bendecirnos!
Hazme digna de Ella, que nunca me falte la Paz.
Gracias, Señor, por ser nuestra paz. Y no dejes nunca de fijarte en nosotros.
Gracias, Señor por ser nuestra paz. Y no dejes nunca de fijarte en nosotros.