Amas a todos

4 de noviembre
Domingo XXXI

Sb 11, 22-12,2 Te compadeces de todos, Señor, porque amas a todos los seres

Señor, el mundo entero es ante ti como grano de arena en una balanza, como gota de rocío mañanero que cae sobre la tierra…pero Tú, en tu bondad infinita, te compadeces de todos y amas a todos. Y entrar en esta dinámica de amor admirable, que crea y recrea, me llena de gozo. Somos pequeños, y por pequeños grandes porque somos fruto de tu amor. Por ello en esta mañana de domingo de alabo, Señor.

 

 

Autor: Nano SM

Religioso Marianista, sacerdote. Actualmente trabajo en la pastoral de un colegio en Madrid, precisamente donde estudié y sentí la llamada a la vocación religiosa. Desde hace tres años escribo cada día un comentario a la Palabra de Dios, que me ayuda a encarnarla y a darla a los demás. De alguna manera participo en la misión de María, dando a Jesús, dando su Palabra.

2 opiniones en “Amas a todos”

  1. Queridos todos, yo me siento amada por nuestro Señor, a pesar de todas mis miserias, me abandono en su divina misericordia, ahí estoy segura, no por mi sino por El.

    Como el Padre me amó, así os he amado yo. Permaneced en mi amor. Si guardáis mis mandamientos, permaneceréis en mi amor, como yo he guardado los mandamientos de mi Padre y permanezco en su amor. Jn 15, 9-17

  2. ¡Que pequeño es el mundo ante Dios y que grande es su bondad y su amor!.
    Es por esto que hoy veo a Zaqueo subirse a una higuera para ver al Señor, pues debe de ser malo vivir lejos del amor de Dios. Zaqueo era rico, rico de dinero, pero su vida sería muy pobre alejada de Dios porque deseaba verlo, deseaba encontrarlo, y para eso es capaz de hacer malabarismos. Él sale al encuentro de Jesús y Jesús se fija en él y se aloja en su casa.
    Yo quiero salir cada día al encuentro de Jesús, quiero que Él se aloje en mi casa, en mi vida, que me hable, que me enseñe para que yo pueda comunicar a los demás su bondad y su amor.

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