16 de diciembre
III Domingo de Adviento
Is 35, 1-6ª.10 En cabeza, alegría perpetua.
Domingo de la alegría; parece que la propia liturgia intuye lo cerca que está ya la presencia del Señor, su venida inminente, y nos llama a cambiar nuestros lutos en danzas, nuestros sayales en vestidos de fiesta. Estad siempre alegres en el Señor, os lo repito, está alegres. Ese es el verdadero motivo de la alegría: que el Señor está cerca. Así vamos hacia Belén: en cabeza, alegría perpetua. Siguiéndolos, gozo y alegría. A esos estás invitado, toda la semana. Date cuenta y vive según esta verdad.
La alegría de la navidad
Estar alegres y en paz.
Con el vecino, y el hermano
Para estar en el camino
Siguiendo el rastro divino
De la estrella que ha salido.
felices navidades Mercedes.
Hoy se han encendido 3 velas, ya solo falta una por encender. Hoy es día de alegría, hasta el cuadro de este comentario nos invigta a sentirnos alegres a través de nuestros ojos. Ya está cerca el Niño, ya está llegando y nuestra esperanza y expectación crece, por eso estamos alegres.
Me doy cuenta de que Jesús está cerca y vivo según esta verdad.
Me acerco a María para compartir con Ella su alegría y esperanza, Ella, la reina de la alegría me ayudará en esta espera.