11 de junio
San Bernabé
Hechos 11, 21-26; 13, 1-3 Volvieron a ayunar y a orar
Ayunar para prescindir de lo superfluo, para no vivir en la fantasía de creerme rico en vez de bendecido por ti, ayunar para recordar mi fragilidad, para manifestar que la sociedad de consumo es un ídolo que nos está matando, para solidarizarme con los que ayunan forzosamente porque no tienen que comer, para abrir mi corazón al prójimo, para vivir más pobre…y orar porque tú eres mi bien, y solo en ti descansa mi ser, orar para ser como tú, contigo, en ti, por ti.
Cual mendiga de lo cotidiano busco la paz en medio del ruido