15 de diciembre
Jueves III de adviento
Is 54, 1-10 Exulta, estéril, que no dabas a luz
rompe a cantar, alégrate, despliega los toldos de tus tiendas, alarga tus cuerdas, extiéndete, no te sonrojes, olvida la vergüenza de tu soltería, yo, el Señor, entro en ti, te desposa tu Hacedor, tu libertador, el que llena la tierra. Con gran cariño te acaricio con mi palabra, con amor eterno te quiero, aunque los montes cambiasen y vacilaran las colinas no cambiaría mi amor. En esa confianza, Señor, reposa mi alma, se ensancha mi corazón cada mañana.
Gracias dueño mío.Qien te desposa es tu Hacedor.Aunque…no cambiarías tu amor.Tu me amas ,de mi vida tú eres el dueño