Ricos

30 de septiembre
XXVI Domingo

Sant 5, 1-6 Vuestra riqueza está podrida

Duras las palabras de denuncia que nos diriges, Señor, en boca de Santiago: habéis vivido con lujo sobre la tierra, y os habéis dado la gran vida, habéis cebado vuestros corazones para el día de la matanza”. Por eso te pido, Señor, que me des el don de vivir más pobremente. Por tu misericordia, Señor, convierte mi corazón.