Todo

15 de enero
Martes I

Hb 2, 5-12 Dios, para quien y por quien existe todo

No se puede decir más con menos palabras, Señor. Déjame rumiar esta afirmación que me trasciende, que me abre la misterio de tu presencia, de tu ser origen y fin, de tu estar en todo y sobre todas las cosas, reclamando el amor exclusivo que se extiende, en ti, a todo ser viviente. Totalidad, exclusividad…déjame reposar tu Palabra más allá de mi mente, anidarla en lo más recóndito de mi ser, para que me trasnforme en ti.