Palabra

1 de junio
Domingo IX

Dt 11, 18-26 Meteos estas palabras mías en el corazón y en el alma

Y no solo ahí, sino que nos pides que las atemos  a la muñeca como un signo, y que las pongamos de señal en nuestra frente. Tu Palabra, Señor, que es siempre signo de bendición.  Tu Palabra, que es roca y baluarte, donde quiero construir mi vida. Tu Palabra, Señor, que hace brillar tu rostro sobre nosotros. Tu Palabra, Señor, que me llega este domingo y me pone ante ti. Tu Palabra, Señor, que quiero acoger y hacer mía para que me hagas tuyo.