23 de junio
Lunes XII
Mt 7, 1-5 No juzguéis y no seréis juzgados
Hoy la palabra que nos brindas en la eucaristía suscita en mi muchos veneros, y no se bien de cuál beber. Me quedo con este, pero podría ser cualquier otra frase. Ayúdame a tener una mirada limpia, la misma mirada que tienes tú, no solo con las personas lejanas, que piensan diferente a mi, sino con los más cercanos, con los que conviven conmigo todos los días. Dame pureza de corazón.