17 de febrero
Martes VI
Gn 6, 5-8 La maldad del hombre crecía sobre la tierra
Y sigue creciendo. Hasta saturar el universo. Que donde haya maldad ponga yo bondad. Sin reservas. Al igual que tú derramas sobre el mundo la fuerza de tu amor, de tu misericordia, de tu salvación. Haznos portadores de tu bien, de tu belleza, de tu bondad, en medio de nuestro mundo. Por la fuerza de tu cruz.

¿Por qué no entienden?
Les diste la vista, y no te ven
el oído, y no te oyen
el olfato, el gusto, el entendimiento
y ni te huelen,
ni te gustan,
ni te conocen
Y entre su infierno por ignorarte
y el mío por conocerte y no tenerte
se va pasando la vida