25 de junio
Lunes XII
Mt 7, 1-5 No juzguéis y no seréis juzgados
Siempre pendientes del prójimo, Señor, siempre juzgando en el interior, siempre con un corazón duro, envidioso, que se compara, que no resiste la brisa de la benevolencia, la mirada de la misericordia. Juzgar, criticar…a lo que somos tan dados sin darnos cuenta que estas actitudes nos separan de ti.

¡¡El evangelio de hoy me ha zarandeado y bien!!
Por tanto mi primera actitud es la de pedirte perdón Señor, por mis juicios precipitados.
Muchas veces me arrepiento, pero eso no me justifica.
Quiero pedirte que me quites mi viga, que pongas en mi corazón más compreción.
¡¡Gracias Nano, por ayudarme a ver mis vigas!!