25 de marzo
Anunciación de Nuestro Señor
Lc 1, 26-38 Alégrate, llena de gracia, el Señor está contigo
Esta es una de las grandes realidades de mi vida. El anuncio que me haces, llamándome a la alegría porque me colmas de tus bendiciones, me engalanas con tu gracia, te haces un Dios cercano, que estás conmigo y me salvas. Todo se hizo más real en el momento de la Encarnación, cuanto tu espíritu entró en el seno de María y te hiciste carne, para nuestra salvación. Gracias, Señor, por esta fiesta que me recuerda quién soy y a qué soy llamado en ti.
