23 de marzo
Domingo III de cuaresma
Ex 3, 1-8.13-15 Quítate las sandalias de los pies, pues el sitio que pisas es terreno sagrado
Te manifiestas. Me descalzas. Entro en terreno sagrado cuando te encuentro donde menos me lo espero. En las personas que claman desde su opresión. En los pobres y descartados de nuestra sociedad. En el desierto, fuera de los márgenes de la ciudad, en la paramera donde está la prisión. En la zarza que arde sin consumirse. Tú eres el que eres, y siempre me desconcierto ante ti, porque tu amor es más fuerte que mi muerte.
