27 de marzo
Sábado V de cuaresma
Ez 37, 21-28 Tendré mi morada junto a ellos, y ellos serán mi pueblo
Ya has puesto tu morada en medio de nuestra tierra, en mi propia carne. Me habitas. Tuyo soy. ¿Qué más puedo pedirte? Que me rindas, ahora y por siempre, sin más contemplaciones
Autor: Nano SM
Religioso Marianista, sacerdote. Actualmente trabajo en la pastoral de un colegio en Madrid, precisamente donde estudié y sentí la llamada a la vocación religiosa.
Desde hace tres años escribo cada día un comentario a la Palabra de Dios, que me ayuda a encarnarla y a darla a los demás. De alguna manera participo en la misión de María, dando a Jesús, dando su Palabra.
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